Reflexones sobre el significado de pertenecer a la Ama

A estas alturas de mi vida al servicio de las mas perversa y hermosa Diosa parece que ha pasado de todo aunque cada situación, cada limite que Usted me ha hecho alcanzar y luego correr, cada bocho que se ha ido cumpliendo en la medida que sus caprichos así lo han marcado, siempre es superada con la próxima de modo que ese extremo solo es un punto de partida para continuar gozando de ser suyo.

Todo esto siempre, inevitablemente, me lleva a pensar en lo que vendrá mas adelante ya que siempre su perversión camina mas rápido que lo que la mente de un esclavo podría siquiera imaginar haciendo que Usted nunca deje de sorprenderme en lo que se le pudiera ocurrir hacer de mi, ya que de lo único que estoy seguro es que mi Ama hará conmigo lo que quiera.

Recordar cada una de las millones de situaciones me hace pasar momentos de un placer inconmensurable pero seguramente haya situaciones en las que ese placer haya sido mas intenso.

De hecho ahora mismo, a altas horas de la madrugada, estar levantado frente a mi computadora escribiendo me causa una sensación inexplicable solo comprensible para un esclavo en serio, ya que el solo hecho de estar aquí y ahora para Usted satisfaciendo su perversión, me hace sentir profundamente esclavo suyo y me recuerda que si bien nada ni nadie me obliga a nada el hacerlo es para fuente de un bienestar tan especial que me atrevo a rogarle que me permita seguir a su servicio para siempre.

Sin embargo me resulta imposible mencionar alguna situación a su servicio que en particular haya sobresalido aunque existe si una sumatoria de situaciones relacionadas a Usted que me llenan de placer y me hacen sonreír de solo revivirlas.

Las ofrendas blancas son algo de eso. Siempre, desde el primer encuentro han sido muy especiales y cargadas de una significación muy particular ya que son solo para Usted, para su goce y disfrute y para que, como esclavo suyo, nunca olvide su lugar recordando que es su discrecionalidad la que decidirá cuando, como y porque se la daré y que haré con ella luego.

Recuerdo el primer día, el primer encuentro en que Usted luego de un buen rato de acción para su placer me pidió una ofrenda blanca. Me sentía tan especial, tan honrado, tan excitado ....que al cabo de solo unos instantes la tenia a la vista para Usted que estaba disfrutando de ver como su esclavo se desesperaba humillado a sus pies para dársela.

Recuerdo aquella tarde cuando estrenaba un nuevo conjunto y se apoyo sobre la pared para pedirme su ofrenda solo con una señal que me saco de quicio, o aquel día que luciendo su fantástica bikini negra me hizo darle su ofrenda mientras disfrutaba del tsunami privado que significa verla desde mi verdadero lugar en el mundo que es a sus pies.

Es imposible no revivir aquella tarde cuando de paseo en la Estación San Isidro con una naturalidad que solo una verdadera Diosa tendría, me alcanzo un cenicero de aluminio, de esos que Usted parece coleccionar pensando en mi, y me pido una ofrenda allí mismo.

Como haría para quitar de mi mente aquel mediodía en el café cerca del túnel de Libertador cuando me alcanzo por primera vez el cenicero sin decirme mas y espero que yo regresara para volcar el contenido en el café y así hacer que tomara un cortado?

Cualquiera podría pensar que soy un masturbador crónico, pero no es así, simplemente soy un esclavo que solo disfruta de ofrendas blancas que por supuesto deben ser pedidas por mi Ama ya que jamás haria nada de eso solo por mi placer. Mi placer se logra solo si mi Ama lo tiene , y en esto no hay excepcion alguna

Conozco su concepto, no hay nada mas humillante que una Ama haga uso y abuso de un esclavo para lograr su propio placer descartando el esclavo una vez que lo ha dejado exhausto y sabiendo que solo se descargara si la perversión de Ella así lo quiere.

Recuerdo este Lunes que paso, cuando su perversión me dejo con las ganas, no me pidió la ofrenda hasta entrada la tarde y debí parar en una estación de servicio en mi camino de regreso para poder dársela y para, desesperado por estar a sus pies, enviarle el sms.

Revivo este Martes cuando me pidió la ofrenda bajo la escalera, en una posición algo incomoda y complicada pero que me hacia sentir mas excitado que nunca solo de verla desde allí paseándose con su atuendo tan celestial y haciendo gala de dominar al mismo tiempo a otro esclavo del otro lado del teléfono. Pocas veces me esmere tanto en darle una ofrenda blanca en especial por estar en ese lugar tan caro a mi condicion de esclavo y por ver su perversión a flor de piel sintiendo lo que todo esclavo debe sentir que es ver a su Ama satisfecha con su servicio.

Es que las ofrendas blancas son eso, son una manera de sentirme esclavo, de sentirme tan dominado que no me atrevo a nada sin su permiso, seria capaz de tolerar la mas larga abstención o el mas increíble abuso de ofrendas blancas solo por darle placer a mi Ama.
A estas alturas ya no me permito fantasear, se que aun su creatividad me llevará a limites insospechados y que situaciones que hoy están en mis mas locas fantasías pronto serán una realidad para mi como esclavo suyo, .....su perversión se encargara de ello.